No imaginas
cuantas horas dedico cada noche a pensar en ti, en el profundo café de tus
ojos,
en la loca forma de tus cejas despeinadas,
en ese lunar que adorna tu
nariz y que aun no se porque me gusta tanto,
pero el tiempo se hace arena entre
mis dedos cuando pienso en los labios gruesos y rosados que dibujan tu sonrisa,
y es que desde que probé tus besos perdí
mi adicción a los chocolates… no me culpes, no había probado nada tan dulce
antes.
El problema
es que ahora desearía tenerlos
solo para mí
–si estás de acuerdo-
una
eternidad-si no es mucho tiempo-
Que
sensación tan mágica es sentir mis labios junto a los tuyos , jugando a crear
los besos mas deliciosos del mundo y es que solo ellos me permiten explorarte,
sentir los bellitos que sombrean tu quijada y tus mejillas, pues mientras te
beso, juego con ellos deslizando mis dedos por tu cara, haciendo que se muevan
tiernamente de un lado a otro…como si danzaran para mi .
Así acompaño la
soledad de mis insomnios, así caliento la mitad de la cama que se congela por
tu ausencia, preguntándome si tu piensas en mi al menos una cuarta parte de lo
que te pienso yo a ti, o si quizás he sido alguna vez la causas de tus desvelos
y que por pensar en mis besos no consigues conciliar el sueño y se te escapan
algunos versos…
Estas son
mis noches contigo y sin ti
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